Cuando el paciente  en tratamiento mejora notablemente pueden ocurrir dos cosas en la familia :
  • La familia siente que su familiar ya esta bien y retira  de golpe aquellas pautas de control que en su momento funcionaron para la mejoría ( dietas, baño controlado, comer acompañado…), incluso deciden  junto  con  el paciente finalizar el tratamiento ( querer ir demasiado rápido).
  • O por el contrario, aun habiendo una notable mejoría no son capaces de ir dejando que el paciente avance con su propio pie e ir retirando gradualmente el control externo ( exceso de control).

La retirada de control  externo es necesario, pero siempre marcado por un especialista.

Cuando hablamos de control externo nos referimos a pautas marcadas pro el especialista, que la  familia lleva a cabo hasta que el afectado tiene un propio control interno, es entonces cuando se decide ir retirando el control externo, y siempre guiado por su terapeuta. Como control externo nos referimos:
  • No saltarse comidas.
  • Cuidar el ritmo de las comidas (ni muy despacio ni muy rápido).
  • No elaborar las comidas, no participar en la compra de alimentos.
  • Comer acompañado.
  • Realización de una dieta.
  • Cuanto de baño acompañado….
Cada paciente tiene pautas de control diferentes según la etapa en la que se encuentre y dependiendo de cuales sean sus síntomas, por ello debe establecerse el control de una forma personalizada, y siempre marcado por su especialista.