El 40 % de las personas con trastornos de la conducta alimentaria son adictos al deporte, según ha informado el presidente de la Sociedad Española de Patología Dual (SEPD). En los últimos años se está incrementado la asiduidad a los gimnasios y la práctica de deporte como una forma de vida saludable.

No obstante, en algunos casos la práctica del ejercicio se convierte en una medida compensatoria para perder peso de forma obsesiva, denominada vigorexia.

Trastornos de la conducta alimentaria y adicción al deporte

Las personas que padecen depresión, rasgos de personalidad obsesivos o trastornos de alimentación, o algún tipo de adición son más vulnerables a desarrollar la vigorexia.

Y es que, muchos autores apuntan que el deporte produce a nivel cerebral las mismas reacciones que provocan las drogas en el cerebro de los consumidores.

Sin embargo, también existen terapias para pacientes con patología dual que incluyen la práctica deportiva como parte del tratamiento. Pero en este caso el ejercicio físico tiene que ser estructurado.

¿Conocéis a personas en vuestro entorno que están obsesionadas con el deporte?