La distorsión de la imagen corporal es un síntoma de los trastornos alimentarios. Las técnicas que se utilizan en la actualidad para tratarlos ya incluyen como objetivo abordarlo. Se ha presentado un estudio (Jose H. Marco; Conxa Perpiñá; Cristina Botella) en el que se comprara la Terapia Cognitivo Conductual para los TCA con y sin  un componente para el tratamiento de la imagen corporal apoyado en técnicas de Realidad Virtual.

El objetivo de este trabajo era comprobar si ambos tipos de tratamiento producen un cambio clínicamente significativo al finalizar el tratamiento y los resultados indicaron que después del tratamiento, se había producido un cambio fiable y clínicamente significativo únicamente en la condición en la que se ha intervenido en la distorsión de la imagen corporal.

Resulta muy interesante puesto que aunque a corto y medio plazo se consiguen superar otros síntomas característicos de los TCA, la insatisfacción corporal perdura en el proceso, y supone un factor riesgo de recaída si no se trata.

¿Sabíais que todos, en especial las mujeres cometemos un error de sobreestimación de aproximadamente 20 cm en partes de nuestro cuerpo que no nos gustan? En los TCA se puede multiplicar por 5