Los cambios estacionales y las características de cada época del año, hacen que sea más frecuente la aparición o las recaídas en los trastornos psicológicos. Por ejemplo las Depresiones son más frecuentes en otoño, mientras que en primavera y verano hay mayor incidencia de los trastornos de alimentación, como la anorexia y la bulimia.
José Luis Carrasco, catedrático de Psiquiatría de la Universidad Complutense, comenta que influyen tanto factores ambientales, como la luz y el clima, junto con otros factores más de tipo social centrados en algunas épocas del año. Los trastornos emocionales, las autoagresiones y los intentos de suicidio aumentan en otoño y en primavera, pero también incrementan considerable en los períodos de reuniones familiares, en los que surgen los conflictos.
En los Trastornos alimentarios como la Anorexia y la Bulimia hay dos épocas de riesgo, la primera con la llegada de las Navidades, relacionadas con las comidas de los días de fiesta; las pacientes se anticipan con miedo al descontrol, y resulta un periodo complicado. Otra época del año es la llegada del buen tiempo que coincide con la primavera y comienzo del verano; tiene que ver con la exposición del cuerpo, se va retirando ropa y las comparaciones son más frecuentes.
Otros factores, además de los biológicos, que influyen son las exigencias que nos marcamos cada uno, como ocurre por ejemplo en muchas amas de casa al llegar las fiestas navideñas o en muchos estudiantes al comenzar el curso escolar, o en periodo de exámenes: En estas épocas aumentan los trastornos de ansiedad significativamente.
¿Conocéis otro tipo de trastornos psicológicos que estén relacionados con los cambios estacionales?, ¿Notáis un cambio en vuestro carácter en función de la época del año?